Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de una relación, que ojalá nunca se diera, EL SOBREPESO, EL GRAN ENEMIGO DE LAS ARTICULACIONES.

Decíamos que ojalá nunca se dieran, porque ojalá nadie tuviera sobrepeso u obesidad por salud de la sociedad y para disminuir el riesgo sobre la salud en general y sobre las articulaciones en particular, sobre todo lumbar, cadera, rodillas y tobillos.

Así, lo primero, sería decir que entendemos por sobrepeso y obesidad, es una acumulación anormal de grasa, en relación a la altura y constitución de una persona. Para ello utilizamos el indice de masa corporal (IMC), que surge de dividir nuestro peso (kg), entre nuestra altura en metros al cuadrado. Así, debería darnos un resultado entre 19-25. Por debajo de 19, es riesgo de desnutrición y por encima de 25, es lo que llamamos sobrepeso y por encima de 30, es obesidad, multiplicándose los riesgos para nuestra salud.

Por ejemplo, una persona con un peso de 70kg y una altura de 1,75m.

KG / ALTURA x ALTURA (1,75×1,75M) = 22,86 un ejemplo de IMC normal.

Una vez aclarado esto, vamos a ver como altera esto sobre las articulaciones. Una articulación, es la unión entre las superficies articulares de dos huesos, recubiertos del cartílago hialino, evitando el roce entre ambos huesos, al hacer de amortiguador, gracias a la ayuda del líquido sinovial, cápsula articular y ligamentos. Las articulaciones, junto a los músculos, produce el movimiento en el cuerpo. Ese movimiento, el peso, el sexo, edad, nuestra actividad física, etc. condiciona como están nuestras articulaciones. Respecto al peso, las articulaciones, están preparadas para soportar un peso determinado, según las características anteriormente señaladas de cada persona, de tal forma, que en condiciones normales, no debería sufrir ningún tipo de alteración en la articulación, manteniendo la integridad de todas sus estructuras.

El deterioro de una articulación, empieza por el cartílago que recubre los huesos, que se va desgastando, permitiendo el choque entre ambos huesos, produciendo limitación de movimiento, hinchazón, dolor, etc. Este proceso, normal con el paso de los años, en personas mayores, es anormal en jóvenes y puede verse causado y acelerado por el exceso de peso.

Las articulaciones que antes mencionamos (lumbares, caderas, rodillas y tobillos), son las encargadas de soportar la mayor parte del peso del cuerpo. Si a ese peso, le añadimos un sobrepeso, produce un aumento de presión, que favorece el deterioro prematuro del cartílago hialino y la aparición del desgaste articular. 

En caso de que ya esté presente el proceso artrósico o de desgaste, el sobrepeso, acelera los síntomas dolorosas, un aumento del trabajo muscular, al pesar mas, pudiendo afectar a ligamentos y tendones indirectamente.

Por esto, os proponemos una serie de cambios «fáciles», pero imprescindibles:
– Hacer deporte diariamente, tiene muchos beneficios.
– Adoptar una dieta estable y sana.
– Hacer un exámen médico exhaustivo.
– Ponernos en manos de especialistas que nos ayuden a retomar una salud lo más óptima, nunca es tarde.

Esperamos haberos ayudado a conocer el alcance de este problema, los beneficios de revertir ese proceso y adoptar buenos hábitos de vida. Esperamos también vuestros comentarios.

Desde Fisioterapia de la Serna, esperamos que os sean de utilidad. Para más información, contacta con nosotros en fisioterapiadelaserna@gmail.com.

Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de un problema muy común y que todos lo hemo spadecido en algún momento de nuestras vidas, EL ESTRÉS.

El estrés, es un proceso natural que responde a nuestra necesidad de adaptarnos al entorno; pero resulta perjudicial si es muy intenso o se prolonga en el tiempo. Por ello, debemos saber que es y como afrontarlo. sin olvidarnos, de que no es sólo un problema adulto, también puede ser un problema de niños. Así para prevenirlo podemos hacer:

• Identificar las situaciones que nos producen estrés y eliminarlas o afrontarlas, sabiendo nuestras limitaciones personales y no exigirnos más de lo que somos capaces.
• Tener un orden de prioridades claro, que nos ayude a optimizar el tiempo y el esfuerzo, de tal forma que no nos superen o agobien demasiado.
• Hacer ejercicio, de tal forma que nos ayude a liberar el exceso de estrés.
• Una dieta equilibrada.
• Un horario ordenado de sueño (entre 6-8 horas es lo que los expertos recomiendan).

El cuerpo, no obstante, nos va a avisar cuando estas situaciones de estrés se nos presenten. Puede ser de diferentes formas:

– Física: ansiedad, irritabilidfad, sudoración, cefaleas, dolores musculares, estomacales, etc.
– Emocional: dificultad para concentrarse, apretamiento o bruxismo mandibular (con sus posibles consecuencias sobre la articulación tmeporomandibular (ATM)), alteración del ánimo, cambios de humor, etc.

Incluso, podemos hablar de tipos de estrés: Sigue leyendo

Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de un descubrimiento reciente. Un descubrimiento, que puede dar mucha luz y esperanza a muchas personas que sufren DOLOR CRÓNICO.

El dolor, es un mecanismo del cuerpo, que siendo muy desagradable, es imprescindible, ya que es la forma que tiene nuestro organismo de avisarnos de que algo no está funcionando bien. El dolor, tiene diversos tipos e intensidades, de tal forma que vamos teniendo diferentes avisos. El problema del dolor, es cuando se cronifica, excediendo su labor de avisar, para mantenerse en el tiempo. Este problema lo sufre al menos del 10% de la población.

Al principio, el aviso del cuerpo, se presenta como estímulos sobre los nervios periféricos (presión, temperatura, etc.), que al pasar de un punto determinado, umbral de dolor, que nuestro cerebro tiene estipulado como nocivo y se trasmite como dolor. Posteriormente, cuando ese dolor se mantiene en el tiempo, se habla de dolor crónico, habitualmente se definía como aquel dolor que se mantenía más de 6 meses. Hoy en día, sabemos también, que hay un tipo de dolor que no se debe a un problema real o algo de lo que defenderse, sino una alteración en los mecanismos de trasmisión de la información del dolor.

Por poner un ejemplo, podemos hablar de un tipo de dolor, es el caso del miembro fantasma, en el cual, hay una alteración en la interpretación por parte del cuerpo de la información y hacen que persista la sensación, faltando el miembro.

Esto es lo que llamamos sensibilización del dolor (o sensibilización central del dolor), pierde su función de aviso, para ser el cerebro el que tiene el daño, el que está afectado, hablamos de dolor neuropático, por tener durante mucho tiempo esa información de impulsos nociceptivos (dolorosos), En este caso, habría que explicar muy bien al paciente que es lo que tiene y como lo vamos a trabajar y desde ahí, trabajar la desensibilazación del dolor.

Hay que trabajar sobre el sistema nervioso central y periférico, para re-instaurar la correcta forma de interpretar el dolor, que conlleve una recuperación de la capacidad del cuerpo de tener una función normal, retomar sus vías normales de trasmisión del dolor y de la interpretación del mismo. Sigue leyendo

Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de un tema muy importante y que cuando nos toca padecer, ya sea en un pie o la cabeza, interfiere de manera importante en nuestra vida. Hablamos del DOLOR. Y creemos que es fundamental entender unos conceptos básicos, para que sea más fácil entender «nuestro dolor», cuando nos toca vivirlo.

Un defecto que se comete a veces por parte de algunos sanitarios, es infravalorar o juzgar el dolor del paciente. Y el dolor es subjetivo, cada uno tiene su umbral y lo vive de una manera. Por eso NUNCA debemos infravalorar ningún dolor.

Lo primero, sería definir que es el dolor. Según International Association for the Study of Pain, podemos definir el dolor como:

«El dolor se define como una experiencia sensorial y emocional desagradable, asociada a un daño de los tejidos real o potencial.»

Ya sea crónico o agudo, por traumatismo o por enfermedad, es una muestra de que algo está pasando en nuestro cuerpo y que los sanitarios debemos saber interpretar y localizar, por la información que nos da el paciente, y por las pruebas diagnósticas que tenemos a nuestro alcance.

Ya que es una de las principales causas por las que se acude a urgencias o al médico, en España se estima que 6 millones de individuos adultos sufren dolor, es decir, el 17,25% de la población adulta. No podemos hablar, los aspectos psicológicos de la enfermedad o proceso doloroso, que causa en el paciente.

¿Cómo funciona el dolor? Sigue leyendo

Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de algo muy importante, que todos podemos padecer y donde la prevención y la actuación temprana es clave, hablamos del ICTUS.

Un ictus es una interrupción de la llegada de sangre a una parte del cerebro. Esta falta de riego puede ser:

• Isquémica, por obstrucción de un vaso, que impide la llegada de sangre.
• Hemorrágica, por rotura de un vaso y pérdida de la sangre por la hemorragia.

El ictus, afecta cada vez a más gente, si bien es cierto que la gran mayoría de los ictus ocurren a personas mayores de 65 años, entre los años 2002 y 2012 la incidencia en menores de 64 años creció de forma significativa, en especial a partir de los 35 años y aumentando más en las mujeres. No podemos olvidar, los casos de ictus infantil e incluso en bebés, que aunque son más raros, existen.

Por lo que la clave, es la prevención, con nuestro estilo de vida, podemos disminuir mucho los riesgos, ya que son factores de riesgo:

1. Hipertensión.
2. Colesterol alto.
3. Obesidad.
4. Consumo de tabaco, alcohol y/o drogas.
5. Sedentariamo.
6. Revisión médica anual.

Esto nos facilita para disminuir el riesgo, pero si llega un ictus, debemos saber cuáles son sus señales de alarma:

1. Pérdida de fuerza y/o sensibilidad en una mitad del cuerpo, podríamos observar que la persona tiene media cara caída, sonríe de forma asimétrica o es incapaz de sostener un objeto con el brazo de la mitad débil de su cuerpo.
2. Dificultad para hablar o entender, hablará de forma ininteligible, inconexa o utilizando palabras que no encajen con el contexto.
3. Vértigo o desequilibrio, puede caerse de forma repentina.
4. Dolor de cabeza intenso, de inicio impetuoso y diferente a lo normal.
5. Pérdida total o parcial de visión o visión borrosa.
6. Hormigueo en cara, brazo, pierna o un lado del cuerpo.

Sabiendo estos síntomas, ¿Cómo debemos actuar?: Sigue leyendo

Desde Fisioterapia de la Serna, hoy no vamos a hablar de ninguna patología, ni dar consejos específicos, hoy sólo queremos hacer un homenaje a las PERSONAS MAYORES. Personas que tanto necesitan de nuestros cuidados y de todos los sanitarios. 

Homenaje que queremos hacerles, porque recordando nuestra infancia, siempre nos vienen recuerdos geniales de nuestros abuelos, los que hemos tenido la suerte de convivir con ellos. Tardes enteras escuchando sus historias, aprendiendo de ellos canciones, juegos, partidas de cartas, historias de la familia, consejos que recordamos toda la vida, etc. al fin y al cabo, mil anédoctas que todos guardamos en nuestro corazón y todas llenas de paciencia.

Llega un día que estas personas, necesitan nuestra ayuda y la necesitan sin quererla, por necesidad, porque la vida les ha quitado la memoria, la fuerza, la habilidad para caminar, destreza para orientarse y un largo sin fin de necesidades que todos hemos visto alguna vez en personas cercanas. Sigue leyendo

Desde Fisioterapia de la Serna hoy queremos daros unas claves para cuidar un órgano a veces muy descuidado: EL CORAZÓN.

Las enfermedades cardiovasculares son patologías propias de las sociedades occidentales. Y teniendo muchos de sus factores de riesgo una fácil prevención, se han convertido en la primera causa de mortalidad en el mundo. Por lo general, un problema que tiene, es que no producen síntomas, y cuando se producen la primera señal muchas veces es un infarto o una angina de pecho.

Debemos intentar actuar sobre los factores de riesgo, para aumentar su riesgo:

1.- Llevar un estilo de vida saludable a nivel físico. Va unido a la disminución en frecuencia y mortalidad de las enfermedades cardiovasculares. Se recomienda hacer mínimo 30 minutos de ejercicio tres días por semana. Sigue leyendo

Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de un tema importante, que siempre nos preocupa cuando lo tenemos cerca y es ayudar al paciente encamado, aunque sea en casa, y al paciente hospitalizado a tener la menor pérdida posible de masa muscular y la mejor y más rápida vuelta a las actividades de la vida diaria (AVD).

Basándonos en nuestra experiencia clínica de años, tanto con pacientes ingresados, como en el tratamiento posterior, domiciliario o en consulta, según el caso y ayudados de la evidencia científica de estudios de universidades y hospitales, es más que evidente que la movilización temprana (siempre que el especialista no diga lo contrario) mejora significativamente la recuperación física y emocional. Sigue leyendo

En Fisioterapia de la Serna, como siempre nos gusta resolver dudas, y una pregunta muy recurrente en consulta y que todos nos hemos hecho alguna vez, es el tema que hace referencia a las aritculaciones.

En el cuerpo humano, los huesos se unen por articulaciones, teniendo varios tipos, pero siendo las más abundantes, las articulaciones sinoviales. En estas, la unión entre los dos huesos se realiza mediante una cápsula articular, y ligamentos y tendones. Dentro de la cápsula, encontramos el cartílago articular, que recubre los huesos y el liquido sinovial, que es un liquido claro y espeso, que amortigua, protege y alimenta a las estructuras que hay dentro de la cápsula y dentro del cual flotan los nutrientes, junto al oxígeno, el nitrógeno y el dióxido de carbono. Sigue leyendo

En Fisioterapia de la Serna, somos conscientes, de que se acerca la vuelta de las vacaciones para la mayoría, con los cambios que conlleva. Un síndrome, que no está calificado como enfermedad por la OMS (Organización Mundial de la Salud) y que dentro de unos límites, es un proceso normal, de cualquier adaptación.

Después de unas vacaciones, necesitamos adaptarnos a la vuelta a la rutina, horarios, al trabajo, el estrés, atascos… y no siempre resulta fácil. Es normal sentir durante unos días, una falta de motivación e incluso falta de concentración. Sin embargo, hablamos del síndrome postvacacional, cuando este proceso continúa durante más de 7-10 días. En este caso, puede notarse insomnio y somnolencia diurna, astenia, gran falta de concentración, incluso alteración del carácter, sensación de que algo está pasando, llegando en algunos casos más extremos a tener síntomas de depresión. Sigue leyendo